Al concluir su actuación, Beyonce se desabrochó la chaqueta púrpura que portaba y se acarició la barriga con una gran sonrisa en su rostro. Su esposo, un jubiloso Jay-Z, recibía en ese momento las felicitaciones de artistas como Kanye West o Lady Gaga.

Cuando todo se supone que debería ser armonía y felicidad en la vida de la sensual Beyoncé Knowles, ahora sale algo en su contra. Su reciente videoclip 1+1 ha sido calificado como diabólico y porno.

Un portal publicó la opinión de algunas personas que desaprueban el material audiovisual. Una mujer puso que "no aceptaba el video en su casa porque su música se ha convertido en demoniaca".

Como se sabe, Beyoncé aparece en el video con un atuendo donde supuestamente está desnuda pero en realidad lleva un bikini de lencería. En otro momento del material nos sorprende apareciendo en una pared donde brota agua mientras mira sensualmente a la cámara. Nada malo a decir verdad.