La jueza del Paraguay Dina Marchuk confirmó que solicitó a la Justicia argentina la extradición de la actriz y vedette Moria Casán y su asistente personal Alexis “Galo” Sotto.

La confirmación se da luego del requerimiento formal que realizó la Fiscalía ante el juzgado debido a que tomaron conocimiento de que los mismos fueron eximidos de la prisión en la Argentina.

Con relación al ex socio de la vedette, Luciano Garbellano, la jueza refirió que no se tenía conocimiento de que el mismo había abandonado el país hasta el domingo pasado, cuando participó de un programa televisivo y reveló que se refugió en Ciudad del Este, aún contando con orden de captura internacional.

El trámite de extradición, señaló la jueza, llevará unos 45 días aproximadamente.

“Ese es el convenio que tenemos con el país vecino, según las reglas del tratado, entonces tendríamos que esperar ese tiempo y los mismos tienen que ser notificados del acta de imputación que pesa sobre esas personas y, posteriormente, serán llamados a una audiencia para que los mismos se constituyan en el país. De no ser así, se declarará la rebeldía de los mismos”, expresó la magistrada paraguaya.

Marchuk dijo que existen elementos “más que suficientes que vinculan a los imputados con la desaparición de unas joyas”, reclamados por el joyero Juan Armando Benítez, y que tendrían un valor superior a 85 mil dólares.

En caso de que la Argentina deniegue la extradición, la causa se tendrá que remitir al vecino país para que tanto Casán como Sotto y Garbellano ser juzgados allí, eventualmente a que se deniegue el pedido.

“Yo creo que la justicia argentina logrará la extradición de estas personas, ya que nosotros también ofrecemos reciprocidad en casos análogos. No creo que el país vecino se quiera ver involucrado en cosas así. Existe el hecho punible y las personas sindicadas como responsables de este delito de apropiación”.

El viernes 27 de julio, Moria Casán presentó un espectáculo producido por Luciano Garbellano en el Centro de Convenciones de la Conmebol, donde usó un colgante de brillantes con zafiros azules y un par de aros con brillantes, entregados en préstamo por el empresario y joyero Juan Armando Benítez, quien denunció ante la Fiscalía que sus joyas no fueron devueltas como habían convenido.