Unas treinta mil personas marcharon en Barcelona protestanto contra los recortes sociales del gobierno de Convergencia y Unión (CiU), en respuesta a la convocatoria encabezada por las centrales obreras CC.OO.(Comisiones Obreras) y UGT (Unión General de los Trabajadores), y los partidos de la oposición catalana.

La marcha partió de la Vía Laietana a la altura de plaza Urquinaona y culminó en el parque de la Ciutadella, pasando por el paseo Isabel II, encabezándola la pancarta "Basta de recortes, defendamos los servicios públicos". Distintas pancartas mostraban leyendas como "Sí a la sanidad pública de calidad", "Recortes no", "No privatización" y símbolos de prohibición rodeando tijeras, y corearon consignas como "Manos arriba, esto es un atraco".

Es la mayor manifestación, desde que arrancó la Legislatura a finales de diciembre, que se expresó contra el gobierno autonómico que preside Artur Mas. Se desarrolló en un tono festivo y uno de los pocos incidentes se produjo en Vía Laietana, donde un grupo de militantes antisistema encapuchados desplegó una gran pancarta desde un balcón en la que se podía leer "La banca, la patronal, los políticos, CC.OO. y UGT, ía la mierda!. Ahora nos toca a nosotros y juntas lo podemos todo", a lo que los manifestantes respondieron con gritos de "íDar la cara!".