Boris Johnson ha sido acusado de corrupción después de que se supo que buscó fondos para la remodelación de su piso de un donante conservador, mientras prometía considerar planes para una misteriosa "gran exposición" .

El primer ministro se enfrenta a nuevas preguntas después de que los mensajes de WhatsApp publicados recientemente con su compañero conservador David Brownlow, muestran que Johnson calificó las partes de su residencia de Downing Street como un "consejo" y pidió "aprobaciones" para que su diseñadora de decoración, Lulu Lytle, pudiera "seguir adelante".