La detención de Pável Dúrov, fundador de Telegram, en Francia ha suscitado un interés considerable en los medios de comunicación y la opinión pública. Según el diario Liberation, las razones detrás de su arresto no están vinculadas a motivos políticos, sino que se fundamentan en varios cargos criminales relacionados con la presunta utilización de la plataforma Telegram para actividades ilícitas.

Las autoridades judiciales han señalado que Dúrov es objeto de investigación por un total de doce cargos, que incluyen complicidad en posesión de pornografía infantil, tráfico de drogas y la negativa a colaborar con las fuerzas del orden durante las indagaciones. La fiscalía ha especificado que estas acusaciones apuntan a la falta de medidas por parte de Dúrov para evitar que su plataforma sea utilizada con fines delictivos, lo que ha llevado a la consideración de su responsabilidad en el contexto de una serie de delitos graves.

Entre los delitos mencionados se encuentran la complicidad en posesión de imágenes de pornografía infantil, el tráfico de drogas, así como el fraude organizado. Adicionalmente, se le acusa de concierto para delinquir, lavado de activos y de no facilitar a las autoridades la información o documentación necesaria para llevar a cabo las investigaciones pertinentes, lo que podría acarrear sanciones severas que incluyen penas de prisión de al menos cinco años.

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha declarado que la detención de Dúrov no se debe a una decisión política, sino que forma parte de un proceso judicial en curso. En un comunicado a través de la red social X, Macron enfatizó que corresponde a los jueces decidir sobre el caso y que la acción legal es el resultado de una investigación formal.

Por su parte, el juez de instrucción a cargo de la pesquisa ha decidido extender la detención preventiva de Dúrov, que podría prolongarse hasta un máximo de 96 horas, según información de fuentes cercanas al caso. La agencia francesa dedicada a la prevención de la violencia contra menores, OFMIN, emitió una orden de arresto en relación con la investigación preliminar en curso, que abarca delitos como el fraude, el tráfico de drogas, el acoso cibernético y la promoción de actividades terroristas.

La detención de Dúrov ha generado una serie de críticas, en especial en lo que respecta a la posible afectación de la libertad de expresión. Celebridades y figuras influyentes, incluido Elon Musk, han expresado su preocupación y han solicitado su liberación. Macron, por su parte, ha descalificado las informaciones erróneas que circulan sobre la naturaleza de la detención y ha reafirmado el compromiso de Francia con la libertad de expresión y comunicación.