EEUU rompió el cerco islamista y siguen los bombardeos sobre Irak
Lo anunció el presidente Barack Obama en referencia al cerco que unos yihadistas mantienen sobre la minoría yazidí desde hace más de una semana.
"La situación en la montaña ha mejorado enormemente y los americanos deberían estar orgullosos de nuestros esfuerzos y del talento y la profesionalidad de nuestros militares y la generosidad de nuestra gente, que rompió el cerco del EI (Estado Islámico) en los Montes Sinjar", aseguró Obama.
"Hemos salvado muchas vidas inocentes. Gracias a estos esfuerzos, no esperamos que tenga que haber una operación adicional para evacuar a gente de la montaña y es improbable que haga falta continuar con el lanzamiento aéreo de ayuda humanitaria", agregó, en declaraciones a la prensa en la isla de Martha`s Vineyard, en Massachusetts, donde pasa las vacaciones.
Miles de yazidíes, aislados desde hace más de una semana en los Montes Sinyar, pudieron escapar, lo que por ahora hace innecesaria una intervención internacional para evacuarlos como la que contemplaba Obama.
La intervención aérea para proteger a personal norteamericano destacado en Irak y evitar las matanzas de minorias continuará, afirmó Obama.
El Pentágono informó que todavía permanecen en el monte Sinyar "entre cuatro y cinco mil" refugiados, de las decenas de miles que han logrado salir en los últimos días gracias a los ataques aéreos estadounidenses y las operaciones de las tropas kurdas.
De ellos, cerca de "2.000 son residentes" en la zona por lo que probablemente no la quieran abandonar, dijo el portavoz del Pentágono, el almirante John Kirby.
Según Kirby, debido a la "mejoría" de la situación es posible que no sean necesarias más operaciones aéreas de entrega de comida y agua a los civiles yazidíes, aunque sí los bombardeos selectivos contra posiciones yihadistas.
El EI inició una ofensiva relámpago en junio pasado que le permitió conquistar extensas zonas del norte y oeste de Irak, desatando la mayor crisis en el país desde que Obama ordenó, en 2011, la salida de Irak de las tropas estadounidenses que lo habían invadido en 2003 para derrocar a Saddam Hussein.
Los islamistas, que tomaron primero Mosul, la segunda ciudad iraquí, capturaron la semana pasada la localidad cristiana más grande de Irak -Qaraqosh- y zonas circundantes, posicionándose así a distancia de tiro de las fronteras del Kurdistán y de Erbil.
El avance de los insurgentes y la estela de violencia a su paso provocaron una enorme crisis humanitaria, con cerca de 200.000 nuevos desplazados, muchos de ellos cristianos, que se sumaron a los casi 1,5 millones de personas que ya habían tenido que dejar sus casas este año debido a la guerra.
El jueves pasado, Obama anunció sorpresivamente que había autorizado ataques aéreos puntuales contra el EI en Irak, y horas más tarde, el viernes a la madrugada, aviones de guerra estadounidenses lanzaron sus primeros bombardeos contra islamistas cerca de Erbil, que continuaron durante el fin de semana.
Además, Washington comenzó a suministrar armas a los kurdos de Irak para combatir una creciente ofensiva islamista.
Los milicianos kurdos, conocidos como "peshmergas", reconquistaron dos ciudades, Makhmour y al-Gweir, ubicadas a unos 45 kilómetros de Erbil, en uno de sus primeros triunfos luego de semanas de retroceso frente al avance del EI, un grupo considerado más extremista que Al Qaeda.
Por otra parte, al menos 40 personas murieron hoy y una veintena resultaron heridas por bombardeos y combates en diferentes puntos de Irak, informaron autoridades del país árabe.
Al menos 15 personas murieron y otras 17 resultaron heridas por ataques aéreos y proyectiles de mortero lanzados sobre varios barrios de la ciudad de Faluyah, en la provincia de Al Anbar, actualmente controlada por el EI.
Los yihadistas perdieron más de 15 combatientes cerca de Duluiyah, unos 80 kilómetros al norte de Bagdad, y en Al Azim, 60 kilómetros al norte de Baquba, capital de la provincia de Diyala, al noreste. En la capital iraquí dos civiles murieron y otros cinco resultaron heridos por proyectiles de mortero.