El presidente de Colombia Juan Manuel Santos anunció el comienzo de un diálogo para desactivar las protestas campesinas iniciadas hace una semana, mientras continuaban las manifestaciones en las carreteras y un líder fue detenido por presuntos vínculos con la guerrilla de las FARC.

Santos anunció que los diálogos arrancarán a las 13:00, local, del martes (18:00 GMT), tras reunirse con líderes de la protesta en la ciudad de Tunja, capital del departamento de Boyacá, donde se presenta una de las situaciones más complejas por el bloqueo de vías y choques entre campesinos y policías.

"He dado las instrucciones para que se acepte la propuesta de los campesinos de (el departamento de) Boyacá para que se reúnan en una mesa representantes de Boyacá, Cundinamarca y Nariño con los ministros respectivos", dijo Santos.

Boyacá y el departamento de Meta (centro-este), donde también hay cortes de rutas, constituyen la despensa de Bogotá, de 7,3 millones de habitantes y donde algunos productos escasean o han subido hasta un 200% de precio.

"Estamos decididos a afrontar esos problemas y a trabajar de la mano para ver cómo vamos saliendo de esos para que los campesinos tengan también un ingreso digno y puedan mantenerse en el campo y ver el futuro con más esperanza", agregó Santos en una declaración pública.

Pese al anuncio de Santos, en algunas ciudades del país se realizaron en la noche del lunes cacerolazos en apoyo a la protesta campesina, reportaron medios de prensa.

En Bogotá, unas 8.000 personas, según estimativos de prensa, hicieron sonar las cacerolas en la central Plaza de Bolívar, frente a la sede del Congreso y a pocos metros de la sede presidencial.

Por otra parte, también este lunes, la Fiscalía informó de la detención de uno de los dirigentes de las protestas, Húbert Ballesteros, vicepresidente de la Federación Sindical Unitaria Agropecuaria (Fensuagro), por supuestos vínculos con las FARC.

Ballesteros fue detenido el domingo en Bogotá y, según la Fiscalía, su captura, por supuestamente buscar financiamiento en el exterior para las FARC, no tiene relación con las manifestaciones campesinas.

Las FARC, a las que el Gobierno ha señalado de infiltrar las manifestaciones, han expresado su apoyo a las protestas campesinas.

El ministro de Agricultura, Francisco Estupiñán, ya se había reunido el fin de semana con los líderes de la protesta en Boyacá sin lograr un acuerdo, aunque una fuente del ministerio dijo a la AFP que "se avanzó mucho".