El papa Francisco abrió el "Año Santo" 2025 de la Iglesia católica, el gran peregrinaje internacional para el cual se esperan más de 30 millones de fieles en Roma. En presencia de unas 30.000 personas, Francisco abrió la Puerta Santa de la basílica de San Pedro del Vaticano, simbolizando la inauguración de este Jubileo "ordinario".