En Libia, Muammar el-Gadafi negó estar herido y dijo que no lo van a encontrar.

El “guía de la revolución” emitió un mensaje por la televisión estatal en el que aseguró que está “bien de salud”, pese a los innumerables bombardeos en los lugares que suele frecuentar, en los que murieron hijos y nietos suyos.

Y añadió que “escondido en un lugar en el que no podrá ser alcanzado por las bombas de la OTAN”.