La Unión Europea ha sido acusada de planificar "una herramienta poderosa para la vigilancia masiva" de los inmigrantes a través de cambios propuestos en una base de datos de huellas dactilares para los solicitantes de asilo.

Activistas de 31 organizaciones no gubernamentales, incluidas Amnistía Internacional y la Red Europea contra el Racismo, hicieron la acusación en una carta abierta al Parlamento Europeo instando a los eurodiputados a repensar los planes para revisar la base de datos Eurodac de huellas dactilares de los solicitantes de asilo.