El vicepresidente ejecutivo de Venezuela aseguró que fue "controlada" la infección respiratoria que padecía el presidente Hugo Chávez, tras la cuarta operación por cáncer a la que fue sometido en la Habana en diciembre.

El ex canciller explicó que el tratamiento que se le está dando al mandatario en estos momentos apunta a superar "los estragos" de la insuficiencia respiratoria que le provocó la infección.

Maduro, señalado por el jefe de Estado venezolano como su sucesor como líder del movimiento político bolivariano, describió que luego de la operación "hubo problemas de complicación en la insuficiencia respiratoria, en la infección que tenía, que ameritaron un reposo y tratamiento intenso, una gran disciplina por parte del presidente Chávez", y resaltó que "afortunadamente hubo resultados positivos de esos tratamientos".

El vicepresidente calificó de "bastante compleja y difícil" la operación a la que fue sometido el mandatario en La Habana, relató que "hubo altos riegos producto de una hemorragia que afortunadamente fue controlada", pero que produjo una situación "más difícil y compleja que la que se había estimado para el postoperatorio".

En cuanto a su estado actual, Maduro señaló que "en términos generales" ve a Chávez "muy tranquilo, muy sereno, muy conciente de todas las fases por las que ha pasado en el postoperatorio".

Precisó que el lunes estuvo, junto con parte del equipo político, con el mandatario a quien actualizaron sobre las distintas situaciones del país.

El vicepresidente se manifestó "optimista" y dijo tener "una gran fe" en que Chávez "termine de superar las secuelas del postoperatorio y los temas que ha tenido de afectación respiratoria".

"Podemos decirle a toda la comunidad internacional y a toda la gente de buena fe interesada en la salud del presidente Chávez que tiene los mejores equipos médicos, gente del más alto nivel en todas las especialidades, un equipo multidisciplinario", describió Maduro.

Sin embargo, el ex canciller enfatizó que más allá de los cuidados médicos, Chávez "se dedica con gran esmero, con gran amor, a su atención y eso realmente es un signo distintivo de el tipo de tratamiento científico, amoroso que recibe el comandante presidente".

Por último, y en cuanto a las críticas de la oposición sobre la política de comunicaciones del gobierno en cuanto a la salud presidencial, Maduro explicó que se buscó "un punto de equilibrio que permita decirle la verdad a nuestro pueblo con la mayor serenidad, con la mayor tranquilidad, pero también las más duras verdades", respetando, al mismo tiempo el derecho a la privacidad del paciente y de sus familiares.