"En la misma línea de lo que han expresado tanto el Congreso de los Diputados como el Tribunal Constitucional, el presidente Rajoy afirmó que la consulta es ilegal y que, por lo tanto, ni se puede celebrar, ni se va a celebrar", informó La Moncloa en un comunicado difundido tras el encuentro entre ambos dirigentes políticos.

"No existe propuesta alternativa más allá de que la consulta no se puede hacer porque es ilegal", había asegurado Mas tras el encuentro, al brindar una conferencia de prensa en el centro cultural Blanquerna, delegación del gobierno catalán en Madrid.

No se esperaban anuncios importantes, pero la reunión entre Rajoy y Mas generó expectativa en pleno debate sobre la posibilidad de una "Tercera Vía" -propuesta de reforma constitucional que defiende el opositor Partido Socialista (PSOE)-, que el líder catalán estaría dispuesto a evaluar.

Además, con el referéndum en un horizonte cercano -la fecha fijada es el próximo 9 de noviembre-, ambos dirigentes parecían estar ante la última oportunidad de abordar posibles soluciones a este conflicto que, si bien tiene bases históricas, tanto culturales como políticas, se potenció con el malestar social generado por la crisis económica y las políticas de recentralización dictadas por la derecha en Madrid.

Sin embargo, después de dos horas y media de discusión, Mas confirmó el desacuerdo y la ausencia de alternativas a su plan separatista.

El líder catalán, no obstante, inició su intervención destacando que existe un "clima de diálogo abierto" entre ambos responsables políticos y que "hoy no es el final de nada".

Mas insistió en que su gobierno tiene la "determinación" de celebrar la consulta independentista, así como "la base social y la legitimidad democrática" -que le dan las últimas elecciones de 2012 y el acuerdo político alcanzado con otras fuerzas catalanas- y que quiere hacerlo de forma "legal y con acuerdo con el Estado", al estilo británico, en referencia al referendo previsto en Escocia.

"Esto no se puede hacer aún pero seguiremos intentándolo", remarcó.

"Pensaba que Rajoy iba a proponer algo concreto, venía preparado para escuchar, pero no hubo propuesta. Se me ha recordado que no podemos hacer la consulta porque es ilegal", enfatizó Mas.

"No podemos analizar algo que no existe. Hoy en día no existe una `Tercera Vía`. Cuando Rajoy se reunió con el PSOE (en referencia al reciente encuentro con el nuevo líder socialista Pedro Sánchez) el único acuerdo público entre ambos fue que no podemos votar", añadió ante una pregunta sobre esta posibilidad.

Sobre el conflicto de fondo entre España y Cataluña, Mas sostuvo que "se quiere hacer creer que esto es un problema legal, pero es político". Y luego agregó: "si nos ponemos de acuerdo en la celebración de la consulta encontraremos una forma legal de hacerlo".

Rajoy recibió a Mas reforzado en parte por el apoyo que recibió del flamante líder socialista Sánchez, quien también rechaza la consulta, aunque pidió al presidente resolver el conflicto proponiendo una reforma federal de la Constitución.

En tanto, Mas aterrizó en Madrid debilitado por el escándalo que estalló en Cataluña con la confesión del ex presidente e histórico líder catalán Jordi Pujol, de que había ocultado dinero en el extranjero durante décadas proveniente de la herencia de su padre. El emblemático Pujol, fundador de CiU (Convergencia i Unió) y "padrino político" de Artur Mas, además de aval para su giro independentista- se encuentra bajo sospechas de corrupción, cuyo alcance aún se deberá determinar, y puede minar las aspiraciones del presidente catalán.