El presidente egipcio, Hosni Mubarak, anunció en un discurso televisivo que permanecerá en su cargo hasta las elecciones de septiembre próximo.

Mubarak, de 82 años, dijo que su "movimiento tiene que ver con el presente y el futuro de Egipto". El mandatario enfrenta multitudinarias protestas desde hace doce días que reclaman su renuncia.

El jefe de Estado árabe continuará ocupando el sillón de mando, contrariamente a los que pronosticó horas atrás el director de la CIA en Estados Unidos, León Panetta, quien había asegurado que Mubarak dimitiría al cargo este mismo jueves.

Las especulaciones que se barajaron en los últimos días –o que trascendieron desde la Casa Blanca- hablaban de una sucesión de poder inmediata que recaería en el vicepresidente Omar Suleiman, con el respaldo de las Fuerzas Armadas egipcias.

Miles de personas se concentraron en la Plaza Tahrir a la espera de novedades aunque no habrá cambios, por el momento, en el gobierno.
El Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas expresó su apoyo a "las legítimas demandas del pueblo" y, poco después, el primer ministro, Ahmed Shafiq, afirmó que "todo está en manos del presidente Hosni Mubarak y no se ha tomado ninguna resolución hasta ahora".

“La gente está muy decepcionada; no se esperaba esto”, afirmó la enviada especial de Prisa Radio a El Cairo, Carla Fibla.

"El pueblo quiere demostrarle que llegará al final; está convocada una movilización para este viernes hacia el parlamente y también al palacio presidencial para que Hosni Mubarak se vaya cuanto antes”, agregó.