En Estados Unidos, al menos veintidós personas murieron por la ola de calor, y el Servicio Meteorológico local informó que el alerta por el golpe de temperatura involucra a ciento cuarenta y un millones de personas.

En Wichita, Kansas, la temperatura alcanzaría al menos 38 grados todos los días hasta el martes, y trepó a 32 grados en lugares como Washington DC.
En total, agregó el Servicio Meteorológico, la ola de calor podría extenderse “hasta agosto en gran parte del este” del país. Afecta particularmente al cultivo del maíz y al ganado.

La situación más parecida a la actual se dio en 1995, donde murieron cientos de personas solamente en la nórdica Chicago.