Otra noche de violencia en Brasil
Manifestantes encapuchados se infiltraron en las marchas pacíficas del Día el Maestro en Sao Paulo y Rio do Janeiro y se enfrentaron con agentes de la Policía Militarizada.
Las ciudades de Sao Paulo y Río do Janeiro vivieron en la noche del martes y hasta la madrugada de hoy violentos disturbios ocurridos tras sendas marchas pacíficas realizadas en el marco del Día del Maestro, que terminaron con más de 200 detenidos y mucha destrucción. Manifestantes encapuchados, al parecer vinculados con el grupo anarquista Black Bloc, se infiltraron en las marchas pacíficas y se enfrentaron con agentes de la Policía Militarizada convirtiendo a las dos mayores y más importantes ciudades del país en campos de batalla.
Se trata, según un balance preliminar, de la protesta con mayor cantidad de detenidos, 206 según coinciden reportes de prensa, desde la ola de manifestaciones que se produjeron en junio pasado.
La página web del diario “O Estado de Sao Paulo” reporta que en Río do Janeiro los activistas invadieron tiendas, incendiaron agencias bancarias y patrulleros, lanzaron pedradas contra el consulado de Estados Unidos, hicieron barricadas con fuego en medio de edificios públicos y lanzaron bombas molotov y otros explosivos de fabricación casera.
En el barrio Cinelandia, centro de la capital fluminense, una pira gigantesca ardió durante horas frente a la Biblioteca Municipal, donde se conserva el mayor acervo de libros del país. También se produjeron violentos enfrentamientos entre policías y unos 200 activistas en las escalinatas del histórico edificio del Theatro Municipal, desde las cuales los militantes arrojaban bombas caseras y los agentes respondían con gas lacrimógeno.
Aunque no fueron reportados heridos, las imágenes de televisión mostraron algunos activistas descompuestos a raíz de las bombas de gas y siendo atendidos por sus compañeros. Hasta altas horas de la madrugada de hoy, autobuses de la policía repletos de activistas marchaban hacia las comisarías.
En Sao Paulo, donde la “guerra urbana” también comenzó al término de la marcha pacífica de los maestros, también se registraron actos de vandalismo en varios puntos céntricos de la ciudad. Según la página web de la revista “Veja”, fueron despedazados la fachada de una concesionaria de ciclomotores, cuatro automóviles y un autobús.
Los activistas también se enfrentaron a la policía con bombas caseras y fueron reprimidos con gas lacrimógeno. Según la policía, tres efectivos resultaron heridos.