El Parlamento griego aprobó el paquete de ajuste propuesto por el gobierno para que Grecia continúe endeudándose con el visto bueno de la Unión Europea, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Central Europeo.

De este modo, el país helénico logrará desbloquear el siguiente tramo de ayudas financieras en el marco del plan de rescate del que le evitará declararse en suspensión de pagos. Fue aprobado con 155 votos favorables, 138 rechazos y 5 abstenciones, y tras la votación, el primer ministro Yeorgos Papandreu resolvió la expulsión del oficialista partido PASOK del diputado Panayiotis Kouroumplis, quien votó contra el plan.

En la calle, miles de personas se manifiestan en contra del ajuste y se teme que puedan reiterarse los violentos enfrentamientos con las fuerzas de seguridad que se sucedieron antes de la votación en el Parlamento. La policía griega reprimió con gases lacrimógenos a los manifestantes que intentaban impedir la votación concentrados en la plaza central Sintagma, lindera al Palacio Legislativo helénico.

Todo ocurre en el marco de la cuarta huelga general por cuarenta y ocho horas convocada por los principales sindicatos y por organizaciones sociales.