Por primera vez en 35 años se reunieron el primer ministro británico y el presidente de Irak
En una reunión histórica donde la amenaza del Estado Islámico (EI) fue el tema central, David Cameron y Hasan Rohan mantuvieron una reunión sin precedentes desde 1979.
En una reunión histórica donde la amenaza del Estado Islámico (EI) fue el tema central, el primer ministro británico, David Cameron, y el presidente iraní, Hasan Rohani, mantuvieron hoy en Nueva York el primer contacto entre jefes de estado de ambos países desde la revolución islámica de 1979.
Rohani dejó testimonio del encuentro -que discutió principalmente la amenaza del EI en Siria e Irak, según fuentes británicas citadas por la agencia EFE- en una fotografía que publicó en su cuenta de Twitter.
Aunque todavía no decidió si se sumará o no a la campaña de bombardeos aéreos que lidera Estados Unidos contra el EI, el Reino Unido desea que Irán se agregue a la alianza contra el grupo yihadista que opera en Irak y Siria, y además busca quebrar el apoyo de Teherán al gobierno sirio de Bashar al Assad.
El Gobierno de Cameron se movilizó especialmente después de que el EI asesinara al rehén británico David Haines y a los periodistas estadounidenses James Foley y Steven Sotloff, y amenazara con matar al rehén británico Alan Henning.
Hoy el presidente francés Francois Hollande confirmó en la ONU que un grupo yihadista del Norte de Argelia decapitó a un ciudadano francés para "castigar" a Francia después de que la Fuerza Aérea gala también ejecutó ataques aéreos el viernes pasado contra el EI.
Antes de verse hoy cara a cara en los márgenes de la Asamblea General de la ONU, Cameron y Rohani habían mantenido ya una conversación telefónica el pasado mes de noviembre.
Reino Unido e Irán acordaron este año reabrir la embajada británica en Teherán, que estaba cerrada desde la toma de esa legación por estudiantes islámicos en 2011.
Los vínculos entre los dos países han sido tormentosos en el pasado, con episodios como el cierre de la embajada británica en Teherán en 1979 a raíz de la Revolución Islámica, el asalto a la embajada iraní en Londres en 1980, la fatwa (condena religiosa a muerte) contra el escritor anglo-indio Salman Rushdie y la detención de miembros de la Marina británica en Irán en 2007 acusados de traspasar aguas territoriales.
En los últimos días, los contactos a distintos niveles entre las potencias occidentales e Irán se han multiplicado ante la posibilidad de cooperar en la lucha contra el extremismo yihadista.
En paralelo, también en Nueva York, continúan las conversaciones entre el grupo 5+1 e Irán para tratar de cerrar un acuerdo que resuelva el conflicto en torno al programa nuclear iraní.