“Es una gran alegría porque ETA nos ha robado muchos años de nuestra vida en libertad. La libertad estuvo limitada por la amenaza del terrorismo y destruyó más 800 vidas de ciudadanos españoles”, evaluó el embajador de España en Argentina, Rafael Estrella sobre el fin de la violencia anunciada por la organización vasca.

“Sin conseguir ninguno de sus objetivos ha reconocido su impotencia”, resumió el diplomático en La Vuelta.

Estrella, no obstante, aclaró que “evidentemente” no renunciarán a condenar los crímenes que ya fueron cometidos por la agrupación extremista.

“Cuando ETA proclamó hace unos años una tregua unilateral hubo más de 92 detenciones de etarras pero no hubo acercamiento”, recordó.
“ETA no sólo estaba aislada por la opinión pública sino también por la comunidad internacional”, subrayó.

El embajador español dijo que los principales fines de la organización eran lograr “autodeterminación y acercamiento de los presos; la anexión de Navarra”.

El pueblo vasco. “Allí hay un socialista como gobernante, elegido por el pueblo: Pachi López. Los simpatizantes de ETA son apenas una minoría”, dijo Estrella.

“ETA estaba desmantelanda en un alto grado; sus dirigentes ya eran gente de 20 o 23 años. Muchos de sus viejos dirigentes están encarcelados por un largo período”, prosiguió el diplomático.

Asimismo, elogió el desempeño de la policía y habló del futuro. “Ahora habrá que ver cómo sucede el proceso de la entrega de armas”.

Pero Estrella aclaró que “en la Constitución española no cabe una amnistía aunque sí se revisará caso por caso”.