Causó sorpresa la aparición de una ballena muerta en las playas de Carrasco, en la zona residencial de la capital uruguaya. Se trata de un cetáceo de 16 metros de largo y más de una tonelada de peso.

Por Continental, Rodrigo García, director de la Organización Para la Conservación de Cetáceos, señaló que es difícil determinar las causas de la muerte. Explicó que “no presenta golpes” ni se ha determinado hasta ahora el contenido de contaminantes que presenta el animal.

“En realidad el animal es un cachalote. Tomaremos muestras para determinar la muerte y que estudiarán el esqueleto”, concluyó García.