La Justicia dispuso que el Sistema de Atención Médica de Emergencia tenga una ambulancia fija y custodia policial en la entrada de la Villa 31 de Retiro, y consideró el trato dado por el SAME "un ejemplo de desidia, desorganización, prejuicio, xenofobia, racismo, incoherencia y desprecio". La disposición se da luego de la muerte de un vecino de ese asentamiento por las demoras en la llegada de la atención médica, una circunstancia repetida, aun con custodia policial, según los reclamos de los vecinos.

Por Continental, el director del SAME, Alberto Crescenti, aclaró que aportaron a la Justicia “todos los elementos para que se investigue el caso. Nunca dejamos de prestar el servicio”, aseguró, y acusó a los vecinos de la 31 de de haber demorado “unas dos horas en llamar al 107”.

“Nunca dejamos de prestar el servicio de ambulancias a los asentamientos. No es que nunca entramos a las villas. En la Villa 31, en Correo Viejo y un lugar de Prefectura, se habían puesto de acuerdo. El día del hecho concreto, la ambulancia estaba en el lugar. Se está haciendo un sumario para deslindar responsabilidades. Si alguien cometió un error, se va a sancionar. Se ha separado al chofer de la ambulancia”, adujo en Magdalena Tempranísimo, y exhortó a “no poner al sistema en un juego político”.