Carlos burgos, de 18 años, se quemó el rostro al incendiarse una sábana de su cama, en el penal donde se encuentra alojado.

Al parecer el fuego se originó al quedarse dormido con un cigarrillo encendido en una de sus manos.

El hecho ocurrió justo antes de una rueda de reconocimiento prevista para tratar de identificar a los agresores de la mujer embarazada.

Se negaron a declarar dos de los detenidos por el secuestro y crimen de Matias Berardi.

En tanto, decenas de policías siguen con la búsqueda del prófugo, sospechoso de ser el autor material del crimen, quien tiene antecedentes penales por otros hechos.