Ocho de los catorce militantes de Quebracho juzgados por daños a un local porteño del ex gobernador Jorge Sobish recibieron condenas pero no irán a prisión hasta que las sentencias no estén firmes.

Los hechos ocurrieron el 4 de abril de 2007 durante una protesta por el asesinato del docente Carlos Fuentealba.

"Hay hombres que deciden sobre la vida y la muerte de los argentinos que jamás han pisado la cárcel. Fernando De la Rúa fue absuelto hace una semana por (las muertes de) el 20 de diciembre y Eduardo Duhalde nunca pisó un tribunal, pero a 14 infelices nos están juzgando por esto", dijo el líder de la agrupación piquetera, Fernando Esteche.

Además de Esteche, Raúl "Boli" Lescano recibió 3 años y medio, mientras que -tal como lo había solicitado la Fiscalía- el Tribunal Oral Federal 3 impartió tres años para Osvaldo Lizzano, Joaquín Isasi, Francisco Da Silva y para los hermanos Facundo, Tomás y Matías Lafit.

El resto de los acusados -Rosalindo José Gutiérrez, Juan Manuel Cornejo, Nicolás Luna, Paulo Cerezuelo, Jairo Salto y Leonardo Arias- fueron absueltos.

Lescano aseguró que la sentencia "es el costo de ser dirigente político en este país".