Falsos policías secuestraron y asaltaron al primo de Margarita Stolbizer
Ingresaron en su casa en Martínez con una orden judicial y le exigieron un soborno para no seguir con la causa. Al no tener el dinero, lo llevaron hasta la casa de su madre.
Un primo de la diputada nacional por el GEN, Margarita Stolbizer, fue víctima de una violenta odisea que comenzó en la localidad bonaerense de Martínez y terminó en un departamento del barrio porteño de Recoleta.
Todo comenzó cuando un grupo de falsos policías ingresó en la vivienda de una de las víctimas con una orden de allanamiento, chalecos antibalas y armas, y comenzaron a revolver todo en busca de dinero. "Le exigían que les pagara plata para no seguir con una causa. Que ese dinero era para dárselo al fiscal de San Martín", contó Elsa Stolbizer, madre del hombre secuestrado y prima de la legisladora.
Una vez que estaban adentro de la casa, los ataron con precintos y los pusieron boca abajo contra el piso. "Mi hijo les dijo que no tenía dinero y me llamó para que yo se lo prestara. Obviamente le dije que sí. Que si era para que quedara libre y se fueran, le daría el dinero", relató Elsa.
Uno de los falsos policías lo llevó hasta la casa de su madre, ubicada en Pueyrredón y Viamonte, en pleno centro porteño para buscar el dinero. "Uno de ellos vino a mi casa con mi hijo. Cosa que a mí no me gustó porque ahora saben dónde vivo y para mí es una inseguridad", sostuvo la mujer.
Entre otras cosas, la mujer contó que durante el trayecto entre la zona norte y la Capital Federal lo amenazaron a su hijo, mientras mantenían contacto telefónico con ella. "Me decían que juntara la plata rápido porque no tenían tiempo", agregó.
"Finalmente les di los 20 mil pesos. Sin conformarse con eso, se fueron de mi casa diciéndome que no hablara con nadie porque de lo contrario tendrían que proceder. Me engrupieron muy bien", sentenció la mujer. Los delincuentes, que siempre se identificaron como policías, huyeron con el hijo y lo abandonaron minutos después en la Panamericana.
"En este país hay que aguantar, siempre dicen que está todo bien. Yo les puedo garantizar que hay inseguridad y no es ninguna sensación", aseveró.