Otro preso se fugó de una cárcel, esta vez en Río Grande, en el extremo sur del país, ante lo cual el Procurador Penitenciario de la Nación, Francisco Mugnolo, denunció este lunes que "alguien de adentro facilita" estos escapes.
Para Mugnolo, el incremento de evasiones de penales responde a que "hay una participación de alguien de adentro que facilita la fuga de las personas", y reiteró que las "condiciones infrahumanas de alojamiento" de los presos contribuyen a que los internos busquen escaparse.

"Hay sistemas edilicios a lo largo del país, sobre todo en las provincias, situaciones de alojamiento malísimas, en condiciones infrahumanas y, por otro lado, siempre hay una participación de alguien de adentro que facilita la fuga de las personas", respondió Mugnolo por radio La Red sobre las causas del aumento de las evasiones de los reclusos.

El Procurador Penitenciario de la Nación, que actúa como un ombudsman de los presos, completó: "Que haya intentos de fuga es normal porque las personas privadas de la libertad aspiran a obtener la libertad".
"Lo que ocurre es que, más allá de que eso sea propio de la naturaleza humana, hay un sistema, hay una profesionalidad, hay una guarda... Realmente llama la atención que en poco tiempo haya tanta evasión", aseveró.

En los últimos tres meses ya se registraron 31 fugas en todo el país, en las que se escaparon 90 internos y sólo fueron recapturados 35.
En la última evasión, un preso al que le habían suspendido las salidas transitorias porque regresó tarde a la cárcel en una de ellas se fugó de un centro de detención de la ciudad de Río Grande, en Tierra del Fuego.

La evasión se registróel domingo pasado, antes del mediodía, en la Unidad de Detención 1 y fue confirmada por el director del Servicio Penitenciario provincial, Diego Vernaz, a medios de comunicación locales.

En los últimos meses se produjeron escapes casi insólitos de diversas cárceles, como el de un grupo de presos que huyó a través de un túnel del penal de Ezeiza, en agosto pasado.
Varios de los reos fueron recapturados, pero apenas se conoció la fuga se produjo una crisis en el Servicio Penitenciario Federal (SPF) y debió renunciar el entonces jefe del organismo, Víctor Hortel.

Hortel fue el creador de la agrupación de presos "K" "Vatayón Militante", cuyos integrantes salían a cumplir actividades supuestamente culturales.
En lugar de Hortel fue designado Alejandro Marambio, quien ya había ocupado el cargo y recibió críticas y cuestionamientos incluso de organismos y dirigentes de derechos humanos.

También hubo fugas en penales y comisarías de Ituzaingó, Merlo, Neuquén, Béccar, Marcos Paz, Rosario y Viedma. En este último caso, la huida fue de un reo que estaba enyesado.