La Justicia aceptó a Hebe de Bonafini como querellante en la causa por amenazas que inició contra Sergio Schoklender.

El juez federal Ariel Lijo ordenó un análisis de las llamadas entrantes y salientes de teléfonos de la asociación Madres de Plaza de Mayo.

También se estudiarán las líneas que utiliza el ex apoderado de la entidad.

La presidenta de Madres y Schoklender se cruzaron ayer en los Tribunales de Retiro, pero no intercambiaron palabra.