Ariel Marcelo Mendoza, el cabo primero de la Policía Federal que está acusado por la muerte de Ariel Domínguez, quien murió al ser alcanzado por una bala que partió del arma del uniformado, prestó declaración indagatoria ante la justicia, tras lo cual quedó libre bajo juramente.

Mendoza dio su versión de los hechos ante la magistrada de instrucción María Gabriela Lanz ante quien habría insistido en la hipótesis de un accidente, cuando el arma se le habría caído mientras colaboraba con otros agentes policiales que perseguían a presuntos delincuentes.

El cabo quedó libre por un pedido de su defensa, ya que en principio el efectivo está acusado de “homicidio culposo”, un delito excarcelable.