Finalmente, llegaron anoche los diez barrabravas cuyo ingreso a Sudáfrica no fue admitido por las autoridades de ese país.

Entre ellos estaba Sergio Roldán, acusado de homicidio.

El grupo, que volvió en un vuelo procedente de Angola, llegó al aeropuerto de Ezeiza poco después de las 22.30.

"Nos robaron!", exclamó uno de los violentos, pero no quiso explayarse sobre la cuestión, y además amenazaron a los hombres de
prensa con hacerles juicio si seguían filmándolos.

Luego, se subieron a una camioneta y dejaron rápidamente el aeropuerto.

Salvo "Flay" Roldán, quien fue detenido, la mayoría dejó el hall central de la estación aérea con los rostros tapados e insultando a los periodistas que montaban guardia en el Aeropuerto Internacional.

Roldán, simpatizante de San Martín de Tucumán, está acusado de haber asesinado a un niño de catorce años durante un enfrentamiento con
hinchas de Atlético.

Este grupo había ido a Sudáfrica para presenciar el Mundial, pero los expulsaron ni bien llegaron a Johannesburgo, por sus antecedentes delictivos.