Hebe de Bonafini echó también de la Fundación de las Madres de Plaza de Mayo a Pablo Schoklender, hermano del ex apoderado investigado por desvío de fondos. En total, dieciséis personas fueron despedidas. La líder de las Madres advirtió que “si cometieron delito tendrán que pagar”.

Admitió que su mayor preocupación es “que ataquen” a la presidenta Cristina Fernández porque se la agarran con ella por rebote”. Reconoció que “hace un año que mantenía discusiones” con Sergio Schoklender porque “quería convertir a la Fundación en una empresa”, pero aclaró que no está arrepentida “de haberle dado una oportunidad”.

En tanto, se confirmó que una Ferrari, un Porsche, un yate, un avión y otras propiedades están a nombre de la empresa Meldorek, de la cual Sergio Schoklender posee el 90 por ciento de las acciones.

El juez federal Norberto Oyarbide anticipó que esta tarde informará detalles de las medidas de prueba que dispuso en la causa por presunto desvío de fondos públicos destinados a la construccion de viviendas. Y, esta mañana, decretó el secreto de sumario.