El juez federal Norberto Oyarbide pidió hoy la captura internacional del represor Alejandro Lawless, quien este martes se fugó cuando era trasladado por la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) a la Alcaidía del Palacio de Tribunales, mientras el Gobierno ofreció una recompensa de 500 mil pesos por "información útil" sobre su paradero.

Fuentes judiciales informaron que el juez Oyarbide comunicó su decisión a Interpol y también lo hizo al Tribunal Oral Federal deBahía Blanca, el que iba a realizar el juicio a Lawless, de 66 años.

La orden de detención del juez fue ordenada en el expediente "Lawless Alejandro, s/evasión", que se tramita desde que la PSA dio aviso del escape del exmilitar procesado por crímenes de lesa humanidad durante la última dictadura.

Ahora, junto al fiscal federal Gerardo Pollicita, se investigará también las responsabilidades de los tres efectivos de la PSA encargados del traslado, los que fueron pasados a disponibilidad preventiva por la conducción nacional de la fuerza.

Lawless, quien durante la última dictadura revistó en el Batallón de Comunicaciones 181 del V Cuerpo del Ejército, está procesado en dos causas en las que se investigan delitos de lesa humanidad en el ámbito de la Armada Argentina, y la otra en jurisdicción del V Cuerpo del Ejército.

A Lawless se lo acusa de una treintena de casos de privación ilegítima de la libertad, y de imposición de tormentos, así como tres homicidios: en 2010 ya se había escapado y sobre el que se aconsejaba evitar que llegara a juicio en libertad.

Según se desprende del expediente, la fuga de Lawless se produjo en la vereda de los tribunales, cuando era trasladado por policías de la PSA, uno de los cuales se bajó del móvil a realizar los trámites de ingreso, ocasión que aprovechó el exmilitar para salir corriendo, dado que no estaba esposado.

En ese contexto, el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación ofreció este miércoles una recompensa de 500 mil pesos por "información útil que permita la captura del ex militar Lawless".

Quienes tengan información que permita dar con su paradero, deben comunicarse con el Programa Nacional de Coordinación para la
Búsqueda de Personas Ordenada por la Justicia (BUSCAR) al teléfono (011) 5300-4020.

Por su parte, la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, calificó de "extraño, reiterativo y peligroso" el caso del represor Lawless, y dijo que el episodio "merece una investigación muy seria porque ofende el esfuerzo y el dolor de quienes lucharon para los delitos que cometieron no queden impunes".

Carlotto dijo que estaba "preocupada" por las repetidas fugas de represores, y recordó la de julio último, cuando Jorge Olivera y Gustavo De Marchi, condenados por delitos de lesa humanidad en San Juan, se fugaron del Hospital Militar Cosme Argerich, de la Ciudad de Buenos Aires.

La dirigente habló de los genocidas como "depredadores" y recordó que "todavía existen núcleos minoritarios que expresan malestar" por la ejecución de juicios por crímenes cometidos durante la dictadura que "se avienen a facilitar esta libertad espuria".

"Es negligencia o, para pensar muy mal, complicidad. Esto es grave, se tendrá que investigar y sancionar a los responsables reales, esto es una ofensa para todos", manifestó Carlotto esta mañana en entrevista con Radio La Red.