En Temperley, partido bonaerense de Lomas de Zamora, se suicidó un niño de doce años, y lo atribuyen al acoso de las autoridades de su escuela y al maltrato de sus compañeros durante las clases de gimnasia.

El luctuoso hecho sucedió el viernes al mediodía, luego de que Mabel, la madre del niño, fuera a la escuela secundaria N° 371 de Lomas de Zamora para pedir que las autoridades le permitieran no asistir a las clases de educación física, en las que su hijo sufría empujones y golpes de algunos de sus compañeros.

Víctor Feletto, el alumno fallecido, tomó la drástica decisión tras regresar a su casa de la escuela. Se disparó en la cabeza con una pistola de su abuelo José, que, indignado, denunció que “nadie” se había ocupado del bullying a su nieto.

Según el abuelo del niño, las autoridades del colegio se negaron a permitir que el chico obviara las clases de educación física y le advirtieron a su madre que perdería el año si no aprobaba esa materia.

“¿Cómo le van a decir eso? El prefería estudiar: fue abanderado el año pasado, sólo tuvo calificaciones de 9 y 10. Ahora lo obligaban a hacer ejercicio aunque él no quería, porque sus compañeros grandotes jugaban a lo bruto y a él, como es chiquito, lo tiraban al suelo”, dijo el hombre, que se identificó como José.