Según fue revelado en las últimas horas, hace dos meses atrás, varios delincuentes entraron a un complejo de canchitas ubicadas en la Villa Korea, Buenos Aires, y se llevaron a una tía política de Candela, quien estuvo 15 horas secuestrada junto a un peligroso narco del barrio, un hombre conocido como "Pitimeco".
La mujer, de nombre María Alejandra Romagnoli, estuvo casada con el hermano de la madre de Candela, Carola Labrador, y es dueña de un supermercado y un buffet, lugar en donde, hasta el día del secuestro, concurría Carola a trabajar todos los días.
El secuestro de Romagnoli y su circunstancial pareja narco se resolvió cuando, tras exigir 30 mil pesos para liberarla, los captores los dejaron en un auto en la localidad de Pilar, informó Clarín en su edición de este domingo.
Los investigadores creen que este episodio podría llegar a ser clave en la resolución del caso del asesinato de Candela, ya que existía el rumor en la zona que Carola y su hermana Betiana entregaban datos a bandas que cometían secuestros a familiares de narcos, y se sospecha que el rapto de Romagnoli podría haber tenido la colaboración de su cuñada.
Esta nueva revelación se suma al hecho de que el padre de Candela es un pirata del asfalto cumpliendo una condena presidiaria y que también el ex marido de la madre se encuentra preso por un delito vinculado a los estupefacientes.
Por su parte, desde la Bonaerense aseguran que seguirán apareciendo datos que corroboren la pista narco, aunque hasta el momento no se tenga señalado con fimenza ningún responsable del secuestro y posterior asesinato de Candela.
En tanto, el Ministerio de Justicia y Seguridad subió a 400 mil pesos la recompensa por datos del homicidio.