Genera polémica la extensión a la antigüedad de los colectivos escolares que aprobó la Legislatura porteña.

De acuerdo a las nuevas disposiciones, se permite que los vehículos tengan hasta veintidós años de uso, cuando antes el máximo era de veinte.

Por Continental, el subsecretario de Transporte porteño afirmó que “son sólo trescientas unidades las que recibieron esa excepción, sobre un total de mil trescientas” que transportan escolares en la ciudad de Buenos Aires.

Guillermo Dietrich explicó que “no había micros [sic] para comprar, porque los colectivos usados en el transporte público de pasajeros fueron habilitados a circular hasta por quince años”, lo que generó un hiato de consumo en este rubro.

“La prioridad nuestra ha sido la seguridad vial. Hay muchas exigencias en la ciudad de Buenos Aires, como que tengan doble puerta y los cinturones de seguridad. El problema es que los chicos no se los ponen”, se quejó en Magdalena Tempranísimo.

Y añadió que “usar un transporte escolar como ‘trencito de la alegría’ no tiene ninguna lógica”.