El Gobierno autorizó un aumento del 9% para las prepagas
La oferta la comunicó la superintendenta de Servicios de Salud, Liliana Korenfeld. Los socios pagarán el incremento recién en julio. Los empresarios pedían un 30% de incremento.
Una resolución que ya tiene lista el Gobierno y que se justifica en el incremento de costos que la prestación de servicios de salud tuvo en los últimos meses, establece que las cuotas de las prepagas aumentarán un 9% a partir de junio. La suba pedida por los directivos era de alrededor de 30% para todo el año. Este miércoles, mientras se cumplía un lock-out en varias clínicas y centros de diagnóstico (paro dispuesto por las propias empresas), referentes del sector mantuvieron diálogos con la superintendenta de Servicios de Salud, Liliana Korenfeld, que había llevado el reclamo de las entidades al Ministerio de Economía.
La funcionaria comunicó la decisión de autorizar una suba de 9% y, además, según varias fuentes consultadas por el matutino, aseguró que en los próximos meses se permitirán nuevos ajustes, por el impacto que tendrá en la estructura de costos la paritaria de la sanidad. Si bien la suba regirá desde junio , se cobrará efectivamente a partir de julio, según explicó Claudio Belocopitt, presidente de Swiss Medical. Por ley, las entidades están obligadas a avisar a los socios cuáles son los nuevos precios con 30 días de anticipación. "Se cobrará en julio la nueva cuota y el retroactivo por la suba de junio", explicó el directivo.
En cuanto a las negociaciones salariales, el sindicato pide un incremento de 29,8% en dos etapas, pero en las empresas señalan que el impacto sería mayor, por algunos adicionales y porque se reclama, ante la inflación creciente, anticipar las fechas de aplicación de las mejoras salariales, respecto de los meses en que se venían dando en los últimos años. La parte empresaria pidió ayer que la propia Superintendencia (que es la autoridad de regulación de la actividad y controla sus costos y precios) se involucre en la negociación.
Como medida de protesta y ante la falta de respuestas que decían tener desde el Gobierno, el miércoles de esta semana las clínicas concretaron un paro y sólo atendieron casos de urgencia. La medida de fuerza se iba a repetir durante 48 horas la semana próxima, pero ayer ante las novedades se decidió suspender ese paro, por lo que las actividades se desarrollarían con normalidad y no habría nuevas medidas de fuerza.