La policía metropolitana desalojó el nuevo predio tomado en Villa Lugano
La Metropolitana desalojó a las 20 personas que habían ocupado ilegalmente, esta madrugada, un terreno ubicado en Zuviría y José León Suárez.
Los ectivos de la Policía Metropolitana lideraron esta mañana el desalojo de otro predio que había sido tomado por vecinos en la intersección de José León Suárez y Zuviría, lo que derivó en incidentes, corridas y pedradas entre esa fuerza y los usurpadores.
El predio, más pequeño que el que permanece ocupado en terrenos cercanos al Parque Indoamericano, fue totalmente despejado pasadas las 9 de hoy. Se mantenía ocupado por una veintena de familias, sobre todo, por mujeres con niños.
Según comentaron más temprano los propios usurpadores en diálogo con la prensa, decidieron impulsar la medida esta madrugada ante la falta de una solución a su reclamo por viviendas. A su vez, desmintieron que se trate de una réplica o consecuencia de la ocupación vigente cerca del Indoamericano.
"Ingresamos esta madrugada. Hace un rato nos dijeron que nos teníamos que retirar porque van a usar la fuerza, pero yo tengo entendido que no nos pueden tocar porque estamos con las criaturas", declaró antes del desalojo Johana Pintos, delegada de las mujeres de la nueva toma, a Radio Continental.
Pasadas las 8, efectivos de la Policía Metropolitana se acercaron al predio. También se informó que el fiscal a cargo del caso se encuentra en el lugar para encontrar una salida al conflicto.
Terreno tomado
El "nuevo" espacio ocupado se encuentra en un predio de viviendas sociales. Las personas que montaron las carpas decían que son familiares de quienes residen en los edificios y exigen una respuesta habitacional por parte del gobierno porteño. La Policía Metropolitana está en la zona.
"Ingresamos esta madrugada. Hace un rato nos dijeron que nos teníamos que retirar porque van a usar la fuerza, pero yo tengo entendido que no nos pueden tocar porque estamos con las criaturas", declaró Johana Pintos, delegada de las mueres que realizaban esta nueva toma. La mujer aseguró que adoptaron la decisión de tomar el terreno ante las promesas incumplidas del gobierno de la Ciudad.
Pintos acusó al puntero Daniel Fernández de vender terrenos en la zona por $5 mil. "Vos venís y te comprás una casita, ellos vienen después, te meten en un censo, y te dan un lugar en las nuevas viviendas que van a construir; el censo te lo venden como si vivieras allí desde 2007 y accedés a una casa", agregó.
La toma de estas tierras extiende el proceso iniciado hace una semana, cuando comenzó el arribo de familias a un predio del sur de la Ciudad, en Fernández de la Cruz y Pola. Allí ya no hay lugares libres y se esfuma la posibilidad de un desalojo
En este sector los vecinos señalan que Marcelo Chancalay fue quien impulsó la toma. Es un puntero que se mueve en un auto importado 0 KM y que pretende ser elegido presidente de la Villa 20. Según declaró en distintos medios, vive del sueldo que le paga el gobierno de la Ciudad desde hace 20 años.
Lo que empezó hace siete días con tres o cuatro carpas, hoy ya se parece a un pequeño barrio de casas humildes. Sucede que en los últimos días fue incesante el arribo de familias y ya casi no hay lugares libres en el predio de Villa Lugano que fue tomado la semana pasada.
Los ocupas aprovecharon el fin de semana para empezar a construir casillas en los sectores del terreno que reconocen como propios. Algunas tienen techo a dos aguas, paredes laterales y sillones. La luz no es un problema: desde el viernes bajan varias líneas de tensión desde las torres de iluminación pública. Y este lunes pudo verse incluso un panadero que vendía medialunas para el desayuno, a metros de una olla popular en la que se ofrece mate cocido para todos y todas.
El proyecto no sufre amenazas: luego de que la Metropolitana suspendiera el desalojo del viernes, la Justicia centró los esfuerzos en averiguar quiénes son los que están vendiendo como propios los terrenos. Algunos vecinos denunciaron que los punteros de la zona piden hasta $20 mil. La presencia de las fuerzas de seguridad es meramente testimonial.
Los dirigentes barriales se aferran a un amparo judicial en el que piden que no los desalojen. El viernes el juez Gabriel Vega había ordenado que avancen las fuerzas de seguridad pero con la caída de la noche se suspendió el operativo.