Dicen que no hay un momento que les transmita tanta paz a los padres que ver a su niño durmiendo plácidamente la siesta. Pero esa sensación puede ser más reconfortante todavía si las siestas se comparten y se convierten en un momento único, que merece ser retratado para que el mundo lo vea.

Algo así le pasó a Jessica Shyba, la madre del pequeño Beau, cuando descubrió que su cachorro Theo, recién adoptado en una perrera, esperaba el momento en el que el bebé se dormía para acomodarse a su lado. "La amistad más orgánica y bella que he visto en la vida", escribió Jessica en la red Instagram y rápidamente recorrió el mundo cuando también decidió subirlas a su cuenta de twitter.

Así fue que las imágenes del pequeño y el cachorro se convirtieron rápidamente en un fenómeno de las redes sociales y se viralizó de tal manera que superó los dos millones de visitas en apenas unos días. "Theo espera plácidamente a que Beau se quede dormido y entonces se acomoda sobre él. Duermen entrelazados durante al menos dos horas", explica la madre en su blog.

Fueron tan buenos y variados los comentarios que recibió de la gente que pudo ver al niño durmiendo plácidamente con el cachorro, que Jessica shyba se entusiasmó de tal modo que ahora piensa escribir un libro con fines benéficos. Con un fin concreto y valedero: todo lo que recaude será destinado para el centro veterinario donde apotaron a Theo.