La Asamblea Ciudadana Ambiental de Gualeguaychú convocó el jueves a una nueva protesta para mañana, para rechazar un proyecto para instalar una nueva pastera sobre el río Uruguay del lado del país vecino, y protestar por el pedido de aumento de la producción de Botnia-UPM.

El Concejo Deliberante local aprobó recientemente una resolución para gestionar que la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU) reclame ante los organismos internacionales correspondientes que se paralice inmediatamente la planta, que al superar 1,1 millón de toneladas de producción está violando los acuerdos bilaterales.

UPM tenía previsto frenar su producción el 14 de septiembre para realizar tareas de mantenimiento en la planta de Fray Bentos. Volvería a operar 25 de septiembre, pero en un comunicado la empresa aclaró que supeditaba la reapertura a que el gobierno de José "Pepe" Mujica autorice a llevar la producción a 1,3 millones de toneladas, lo cual sería rechazado según fuentes citadas por el diario uruguayo El País. En tal caso, la planta permanecerá paralizada hasta noviembre.

En este marco, los vecinos se concretarán mañana a 28 kilómetros de Gualeguaychú, en el paraje Arroyo Verde, sobre la ruta 136. A las 15 partirán hacia el puente binacional General San Martín, donde se leerán un documento antes de retornar a la ciudad, para realizar una jornada concientización en la costanera.

La asamblea ciudadana pidió, además, una reunión con el intendente de Gualeguaychú, Juan José Bahillo. La idea es solicitarle una audiencia con el canciller argentino Héctor Timerman. También le mandaron una carta al embajador argentino en Uruguay, Dante Dovena. El objetivo es que las autoridades acompañen su reclamo.

"Esta realidad crítica que tenemos no se puede cambiar con medidas parciales o sectoriales. El único modo que tenemos para cambiarla es que nos unamos todos los sectores políticos argentinos", analizó el edil Juan Maya. "Creo que hemos encontrado un camino y es en la unidad de la política que tenemos que desarrollar para frenar estos avances de las multinacionales cuyo accionar parece estar guionado desde el poder central", agregó.

Por lo pronto, UPM anticipó en un comunicado que "en el inicio de los trabajos y en la puesta en marcha de la planta pueden generarse episodios de olor". Los vecinos ya están acostumbrados. Pero no se resignan.