Miles de fieles rinden devoción a San Expedito
El párroco de Nuestra Señora de Balvanera, Juan Carlos Ares, estimó que la concurrencia crecerá este año, debido al nombramiento del papa argentino. La procesión será a las 17.
Miles de fieles se congregaron desde ayer en la parroquia Nuestra Señora de Balvanera para celebrar la fiesta del patrono y donde este mediodía se realizará la misa central. Por ello, el jueves desde temprano algunos fieles se acercaron a la parroquia para encender una vela y rezarle al patrono de las causas justas y urgentes frente a la imposibilidad de asistir a los festejos de mañana.
La fiesta del popular santo comenzó a medianoche con la apertura solemne del templo y la misa de inicio, presidida por el obispo auxiliar de Buenos Aires, monseñor Vicente Bokalic Iglic.
"San Expedito, ayúdanos a creer y a servir" es el lema elegido para este año por la parroquia Nuestra Señora de Balvanera, destacó por Continental Juan Carlos Ares, párroco del lugar. En La Mañana, estimó que la concurrencia, que viene creciendo año a año, “esta vez será aún mayor, debido a la renovación de la fe que se observa en la feligresía con la elección de Francisco para el Papado”.
La devoción al patrono de las causas urgentes y también de los jóvenes, estudiantes, mediador en procesos y juicios y protector de la familia y los enfermos, atrae año tras año a decenas de miles de fieles, que hacen largas colas para tocar la imagen.
Esta tarde, a las 14 y a las 15.30, se celebrarán misas en la calle por las familias, presidida por el rector de San Cayetano, Jorge Torres Carbonel; y por la solidaridad con los más pobres, celebrada por el rector de San Pantaleón, Carlos Otero. En tanto, a las 17 comenzará la procesión de la imagen peregrina de San Expedito por las calles del barrio, presidida por el párroco Ares.
San Expedito era un militar romano que vivió a principios del siglo IV y llegó a ser comandante de una legión romana, en la época del emperador Dioclesiano. Según la leyenda popular, su conversión se produce luego de una batalla, conmovido por la actitud de los cristianos al enfrentar la muerte.