Un abogado pidió que “se clausure en forma preventiva el Palacio de Tribunales hasta tanto se tomen las medidas necesarias para salvaguardar los peligros para la vida de funcionarios, empleados y público en general”, al denunciar "el total abandono y temerarias omisiones a las mínimas reglas de prevención de incendios" en el edificio de la calle Talcahuano. Mediante una acción de amparo presentada ante el juez federal Sebastián Ramos -subrogado durante la “feria” de invierno por su colega Daniel Rafecas- el letrado Isaac Wieder interpuso la acción “contra la Corte Suprema de Justicia de la Nación”.

En un escrito de 10 carillas al que adjuntó una docena de fotografías, el abogado también solicitó que se “habilite la feria” ante la gravedad del caso para evitar que el edificio de Talcahuano 550” se transforme en “un nuevo Cromagnon”, en referencia a la tragedia del boliche de Once donde murieron 194 jóvenes. Wieder pidió la clausura del edificio ubicado en la manzana comprendida entre las calle Talcahuano, Lavalle, Uruguay y Tucumán “ante los gravísimos riesgos que corren miles de empleados, funcionarios, público en general, mis clientes y mi propia persona, por el total abandono y temerarias omisiones a las mínimas reglas de prevención de incendios que son de cumplimiento obligatorio”. 

“Desde hace más de dos años las entradas a las escaleras centrales y principales del Palacio de Justicia, en todos sus pisos, se encuentran bloqueadas”, explicó el letrado, y enfatizó que “los ascensores son antiguos y no tienen espacios necesarios para transportar una camilla médica a una ambulancia”. El denunciante explicó que el Palacio de Justicia “tiene 60 mil metros cuadrados de superficie” en ocho plantas, “con cientos de oficinas y miles de toneladas de papel, que es considerado altamente inflamable” y es recorrido diariamente por “miles de personas”.

“Todas las salidas a la escaleras se encuentran bloqueadas en el cuarto piso”, sede de la Corte Suprema de Justicia, donde tienen sus despachos los ministros del máximo tribunal, las diversas secretarías, la sala de Acuerdo y el recinto donde se realizan las audiencias públicas. Wieder aludió a la “falta de iluminación de emergencia, señalización para las vías de escapes, tubos de matafuegos (totalmente insuficientes) vías de escapes y evacuaciones de emergencia bloqueadas e insuficientes”.
“Concretamente las vías de escape son absolutamente incapaces para una eventual evacuación de emergencia y guardando las distancias, se transformarán en un gigante Titanic”, graficó poniendo como ejemplo al transatlántico hundido en 1912 y que provocó más de 1.500 muertes.