“Llegaron un montón de consultas”, señaló Pablo Asorin, instructor del Centro de Estudios de Seguridad Vial, encargado de capacitar choferes de empresas para que no provoquen daños a terceros en calles y rutas.

Es que son reiteradas las denuncias acerca de pedidos desmedidos por parte de los oficiales que controlan las autovías para con los conductores que transitan los principales caminos argentinos.

Asorín quedó involucrado en uno de estos controles. “La policía bonaerense me hizo un control normal, me pidió registro, cédula verde, seguro. El matafuegos no me lo revisó y tampoco me exigieron balizas”, relató el representante del Cesvi.

“Luego me pidió la bolsa, la manta mortuoria, algo que me pareció insólito porque le comenté que yo estaba en el tema y conocía las reglas. Me dejó ir y retomé la marcha”, agregó.

“No podemos creer las denuncias sobre lo mal que se controla en las rutas y sobre todo el desconocimiento de la gente sobre las leyes de tránsito. También ocurre con conductores profesionales”, lamentó.

En ese sentido, remarcó la necesidad de tener siempre al día la cédula verde, que vence al año o a los dos años. De no ser el titular del vehículo, el conductor también deberá llevar la cédula azul. En otro orden, aclaró, “el matafuego tiene que estar sujeto con elementos de metal”.

“El chaleco reflectivo tampoco es obligatorio pero es recomendable por cualquier desperfecto que ocurra durante la noche con el vehículo”, sostuvo Asorin.