Se cumplen 32 meses de la catástrofe ferroviaria de Once. Ayer, el papa Francisco recibió a familiares de víctimas de la tragedia, y les exaltó “la importancia de esperar y la virtud de la esperanza”, consignó por Continental Mónica Pontiroli, madre de “Toto”, uno de los fallecidos en la tragedia.
 
“Todos nosotros sabemos que cuando no estamos en paz con las personas, hay un muro. Hay un muro que nos divide. Pero Jesús nos ofrece su servicio de abatir este muro, para que podamos encontrarnos. Y si estamos divididos, no somos amigos: somos enemigos”, advirtió Francisco en la homilía del martes en el Vaticano.
 
Participaron de la misa en representación de los familiares de víctimas de la tragedia de Once María Luján Rey, Zulma Ojeda de Garbuio, Daniela Garzón, Esther Bustamante, Noemí Flores, Haydée Alonso y Elisa Ojeda, además de Pontiroli, quien, en La Mirada Despierta, destacó que “desde el primer momento nos sentimos acompañados por el cardenal Bergoglio”. Asimismo, resaltó “el afecto y la cercanía” que experimentaron con la carta que el sumo pontífice católico les envió en febrero de este año, al cumplirse dos años de la catástrofe que causó 51 muertos y más de 700 heridos.