Un siniestro hecho conciencia por familiares del colegio Ecos
Familiares de los nueve estudiantes y la docente del porteño colegio Ecos que murieron en un siniestro vial el 8 de octubre del 2006 en Santa Fe, cuando regresaban de una misión solidaria, realizaron un festival en Palermo para promover la conducta de "conducir a conciencia".
"Con este festival sacamos un poco la tristeza los que nos pusimos a hacer cosas para transmitir un mensaje, y en la convocatoria nos damos cuenta de que el mensaje fue captado por la gente; lo que estamos intentando es que se vea reflejado en la vía pública", dijo a Télam Sergio Kohen, papá de Nicolás.
El encuentro se realizó en coincidencia con el quinto aniversario del siniestro vial conocido como la "tragedia de Santa Fe", cuando el micro en el que el contingente escolar volvía desde Chaco, en misión solidaria, chocó contra un camión en la Ruta 11.
Desde las primeras horas de la tarde y hasta el cierre, un enorme escenario en el espacio verde en Figueroa Alcorta y Pampa albergó a Los Auténticos Decadentes, Los Tipitos, Riddim, Rally Barrionuevo, León Gieco con D-Mente y otros artistas.
La canción "8 de Octubre", un tema instrumental de Luis Alberto Spinetta al que Gieco puso letra en recordación de las víctimas, fue interpretada por León a modo de himno identificatorio de la causa.
Espectáculos infantiles de la programación de Pakapaka abrieron la jornada para las familias que se reunían alrededor del mate y las facturas, tras dejar sus donaciones de leche en polvo, cacao, aceite, azúcar, arroz y otros alimentos no perecederos para escuelas de Corrientes, Chaco, Santiago del Estero y Jujuy.
"Los 8 de octubre se transformaron en un desafío porque para nosotros es una fecha triste pero, pensando en una actitud reparatoria, nos gratifica saber que podemos transmitir a la sociedad un concepto de vida", comentó Kohen.
"Proyectamos lo que nuestros hijos hacían -la solidaridad hacia los lugares carenciados- y las donaciones se clasifican y parten hacia escuelas, hogares, salitas y hospitales humildes", indicó.
El papá contó que "durante el año nos invitan a muchas actividades, entre ellas, un congreso de seguridad vial del que acabo de venir, en Bogotá, porque formamos parte de la Federación Iberoamericana Contra la Violencia Vial y participamos en representación de Argentina".
El congreso analizó "una verdadera pandemia por la que mueren 1.300.000 de personas por año en el mundo, que puso a los gobiernos a reflexionar para establecer estrategias ante el incremento del parque automotor y motos, y la falta de sanción y educación, que incrementan las tasas de siniestralidad", dijo.
Kohen opinó que "el tema de la seguridad vial es muy complejo, y una de las claves es que cada vez que uno comete una infracción o maniobra que compromete la vida propia y la de terceros, es un hecho social".
Entre las medidas a tomar, Kohen mencionó "la licencia única, que se va a lanzar próximamente, a partir de la ley, y a la que adhiere la gran mayoría de las provincias".
"Desde hace cinco años, cuando murieron nuestros hijos, a la fecha, estamos mejor aunque falta mucho por hacer", balanceó.
Ahora "se habla del control de alcoholemia, hicimos un plan denominado `conductor designado` para los chicos que salen a un boliche, pero falta tanto que hay que seguir luchando y modificar las conductas individuales, respetando por ejemplo al peatón, que importa cuatro de cada diez muertes de tránsito", enfatizó.
El 8 de octubre fue incorporado al calendario escolar por el Ministerio de Educación como Día del Estudiante Solidario en recuerdo de Benjamín, Daniela, Delfina, Federico, Julieta, Julieta, Justine, Lucas, Nicolás y Mariana.
Los familiares y amigos de las víctimas de la tragedia de Santa Fe, reunidos en la organización no gubernamental "Conduciendo a conciencia", hicieron anteriormente dos recitales en Obras Sanitarias, uno en Argentinos Juniors y otro en el Luna Park.
A fines del 2010, la Cámara Penal de Apelaciones de la ciudad de Vera, Santa Fe, revocó el fallo de primera instancia por el que había sido absuelto en 2009 el chofer del ómnibus, Oscar Atamañuk, por lo que volverá a ser juzgado.
"Si el chofer Atamañuk hubiera cumplido con las normas de tránsito “ir a 90 kilómetros por hora” y manejado según las prácticas de conductor profesional “aminorar la marcha e ir a la banquina”, la tragedia podría haberse evitado", sostuvo la Cámara.