Según el comunicado de FIFPro, las futbolistas argentinas aportaron "evidencia" para probar que "el entrenador en cuestión utilizó su posición de poder para intimidar y acosar sexualmente a distintas adolescentes, alguna incluso de 14 años".

En lo que debió haber sido un entorno seguro, las chicas fueron víctimas de amenazas y comentarios sexuales de explícita y violenta naturaleza", denunciaron desde FIFPro, que se ocupan de asesorar legalmente a las jugadoras involucradas.

Por esta grave denuncia, desde FIFPro solicitaron a la FIFA "la inmediata destitución del entrenador de su cargo actual, en el que podría acceder y ejercer poder sobre menores". Desde la organización también se pusieron a disposición para recibir el testimonio de otras futbolistas afectadas para sumar a la denuncia.

"FIFPro no sólo provee apoyo legal a estas valientes futbolistas que, en una acción colectiva, están determinadas a jugar un rol clave para que el fútbol se desarrolle en un ambiente más seguro e inclusivo; sino que anima a otras futbolistas afectadas a ponerse en contacto a través del siguiente correo electrónico: legal@fifpro.org. Sus reportes serán tratados con absoluta confidencialidad", completa el comunicado del organismo con sede en Países Bajos.

Hasta el momento la AFA no ha sacado ningún comunicado y el acusado no fue identificado públicamente. Un caso similar al de las jugadoras de la selección española que se ve reflejado en el libro " No las llames chicas, llamalas futbolistas", publicado por la periodista Danae Boronat, a raíz de los maltratos del entrenador Ignacio Quereda, quien estuvo en su cargo durante 27 años.