La gobernadora de Tierra del Fuego, Fabiana Ríos (Partido Social Patagónico), consiguió recuperar los casi nueve puntos que le había sacado la kirchnerista Rosana Bertone (Frente para la Victoria) en la primera vuelta y ayer ganó el ballottage que le abrió las puertas a otros cuatro años en el cargo.
Escrutadas las 287 mesas diseminadas en Ushuaia, Río Grande y Tolhin, la mandataria reelecta cosechó 36.201 sufragios (50,22%) contra los 35.255 (48,91%) de su adversaria. La diferencia fue de apenas 946 boletas.
El principal elemento que incidió en el resultado fue la brusca reducción del voto en blanco (0,86%), que siete días antes se había colocado en el tercer lugar de las preferencias (11,33%).
A la expectativa generada por un eventual triunfo de Bertone --que llevó como compañero de fórmula al joven Martín Pérez, de la agrupación La Cámpora-- contribuyó una encuesta a boca de urna que la daba ganadora por varios puntos. Ante semejante perspectiva, los festejos comenzaron temprano en el bunker "K".
Cuando comenzó a avanzar el escrutinio, sin embargo, las voces se fueron apagando en el gimnasio María Auxiliadora, de Río Grande, y los gritos de felicidad se trasladaron al comité del oficialismo provincial, en la misma ciudad, hasta donde viajó el ministro del Interior, Florencio Randazzo.
Al hablar ante sus partidarios, Ríos --que tendrá como vice al empresario Roberto Croccianelli-- calificó el éxito como una "epopeya" y "un milagro de todos los fueguinos". También tuvo presente que, desde el 10 de diciembre, deberá gobernar con una Legislatura ampliamente opositora. Ante esa realidad, convocó a sus rivales para "sumar y construir".
"Nosotros no tenemos pantalla gigante para mostrar nada, apenas un humilde local partidario con calor humano, convicción y ganas de seguir adelante", expresó, en tono emocionado.
"Quienes integramos el Social Patagónico sabemos que necesitamos radicales, peronistas e independientes. No nos montamos en proyectos ajenos, pero sabemos que necesitamos de todos", remató.
Si bien Bertone fue la única que consiguió una foto con Cristina Fernández, de alta imagen positiva en el territorio austral, Ríos manifestó, desde el comienzo, una aceitada relación con la jefa del Estado.
Otro dato que, seguramente, la envalentonó fue que en 2007 también había perdido la ronda inicial, a manos de Hugo Cóccaro, y después --por entonces con los colores de Alternativa por una República de Iguales (ARI)-- ganó la votación decisiva.
Una primera lectura de la jornada permite observar la notable independencia del electorado, considerando el pronunciamiento de distintos estratos partidarios y sindicales a favor de Bertone. La concurrencia a las urnas fue, además, casi la misma que la del domingo pasado (66,32% ayer contra 66,2%).