En homenaje a los Mártires de Chicago, se conmemora el Día del Trabajador. En 1886 los trabajadores comenzaron una lucha por sus derechos; la jornada laboral de ocho horas fue uno de esos reclamos. Solían trabajar entre 12 y 16 horas.

Durante 1886 varios obreros iniciaron una huelga que afectó a varias fábricas en Estados Unidos. A pesar de la Ley Ingersoll, que establecía ocho horas laborales, los empleadores no la aceptaron. Por eso, el 1° de mayo los trabajadores continuaron con la protesta.