Los anuncios fueron emitidos primero por Google y luego por Facebook y se enmarcan en las críticas asignadas a la red social al vincularla con la difusión de noticias falsas que presuntamente favorecieron a Donald Trump durante la campaña en las elecciones presidenciales de Estados Unidos.


"Vamos a restringir la publicación de avisos en sitios que malinterpreten u oculten información acerca del editor, el contenido o el propósito de la propiedad web", afirmó una vocera de Google.

En este sentido, el gigante de Internet presentó una actualización de sus políticas que limita la publicación de publicidades en sitios de noticias falsas.

Luego, Facebook también anunció una actualización en los términos de las políticas vinculadas con su plataforma publicitaria, la cual ya prohíbe los avisos en sitios que muestren contenido "engañoso o ilegal". De esta forma, esta prohibición ahora también se aplicará a los sitios de noticias falsas.