Igual resultado, misma reacción
Así se desprende del análisis de los votos oficialistas en 2009 y en 2013. Cristina tuvo la oportunidad de llevar a la Argentina a un futuro próspero.
Cuando la presidenta trata de ser un ‘servil’ al que fue elegido como ella, es destituyente.
El gobierno de Cristina Fernández es anacrónico e involutivo.