Argentina arrancó ganando su participación en el Mundial de Brasil, y aunque en el juego dejó más dudas que certezas, lo importante es que sumó tres puntos importantes ante Bosnia, el presunto rival duro del Grupo F.

El seleccionado argentino se impuso 2 a 1 en el Maracaná de Río de Janeiro con goles de Kolasinac en contra y Lionel Messi.

El partido se abrió rápido, pero no le dio tranquilidad al equipo de Alejandro Sabella. A los 2 minutos ya estaba ganando, pero Argentina jugó el primer tiempo con las luces apagadas. Le faltó vuelo, Messi no apareció, y los bosnios emparejaron el trámite.

EL DT paró en cancha un sistema táctico que trabajó poco y nada, y no le resultó. Por eso en el segundo tiempo desarmó el improvisado 5-3-2 y mandó a la cancha a Fernando Gago y Gonzalo Higuaín. Así, el equipo jugó con el 4-4-3 que venía utilizando antes del Mundial.



En el segundo tiempo, Argentina aceleró y Messi se lució con un golazo de zurda que definió el partido. La puso abajo contra un palo y dejó sin chances al arquero bosnio.

Los balcánicos descontaron a los 39 minutos y le pusieron suspenso al partido. Sabella armó un 4-4-2 para aguantar los minutos finales y el debut terminó en victoria. Eso sí: con más dudas que certezas. Hay mucho que mejorar.