Argentina se instaló hoy una vez más en los cuartos de final de la Copa Davis, al alcanzar un marcador irremontable de 3-0 sobre Alemania, merced al triunfo en dobles de David Nalbandian y Horacio Zeballos sobre Tobias Kamke y Christopher Kas, por 6-1, 6-4, 5-7 y 6-2.

Nalbandian, símbolo "copero" del equipo argentino, y Zeballos, emplearon cuatro horas y 44 minutos en concretar lo que se intuía desde ayer y vinieron a buscar las casi cinco mil personas que dieron rienda suelta al festejo en el estadio Mary Terán de Weiss, un escenario en el que se ganaron 10 series sobre 11 jugadas.

El equipo conducido por Martín Jaite tendrá como próximo rival a Francia, nuevamente en Buenos Aires, entre el 5 y 7 de abril próximos, mientras que los alemanes deberán jugar un repechaje en septiembre para mantenerse en el Grupo Mundial de la Davis.

Argentina comenzó a edificar su victoria ayer con los triunfos de Carlos Berlocq (70) sobre Philip Kohlschreiber (19) por 3-6, 7-5, 2-6, 6-4, 4-5 y abandono por lesión, y de Juan Mónaco (12) ante Florian Mayer (28) por 6-7 (4-7), 6-3, 6-3 y 6-4.

La serie se completará mañana desde las 11 con los partidos entre "Pico" Mónaco y posiblemente Kamke, el natural reemplazo de Kohlschreiber, quien se desgarró y regresó a Alemania, y luego cerrarán, siempre al mejor de tres sets porque está la eliminatoria definida, Berlocq y Mayer, aunque los capitanes pueden variar de nombres hasta una hora antes de cada partido.

Argentina consumó su 12do. triunfo consecutivo desde que regresó al Grupo Mundial en 2001 y se quitó de encima un peso grande, el de los "fantasmas" que surgieron cuando Juan Martín Del Potro (7), el mejor tenista del país, renunció a fines de 2012 a jugar la Davis durante todo 2013.

Sin la figura de Del Potro, el equipo "albiceleste" le puso mucha garra y actitud, y los triunfos de ayer en los singles tuvieron continuidad en el dobles, con un Nalbandian inspiradísimo como hacía mucho tiempo no se veía, y talentoso como lo fue siempre, más el marplatense Zeballos en un nivel alto.

Nalbandian y Zeballos habían jugado por última vez en 2010, cuando se unieron en Estocolmo para vencer a los suecos Robert Lindstedt y Robin Soderling en la serie que finalmente se ganó por 3 a 2.

Sus rivales, en tanto, debieron armarse de apuro ya que la lesión de Kohlschreiber dejó a Kas sin compañero y tuvo que jugar Kamke, en una improvisación que pagaron con la derrota.

Es que el dobles argentino comenzó afiladísimo, muy metido, y marcó claras diferencias en el primer set que se llevó por 6-1 en apenas 24 minutos, ante dos alemanes desconcertados y erráticos.

Nalbandian, con mucha presencia en la cancha, liberó al "zurdo" Zeballos y así jugó un primer set impecable, con mucha superioridad sobre dos tenistas que eligieron la táctica de saque y fondo y no les dio resultado.

En el segundo set, un quiebre sobre el saque de Kas (2-1) le permitió a los argentinos marchar al frente hasta definirlo por 6-4 sin pasar sobresaltos.

Recién en el tercer parcial mejoró un poco Kamke y Kas demostró que tiene experiencia en el dobles, y así lograron ganar por 7-5 y estirar la serie, aunque jamás dieron la sensación de que podían ganarla.

En el cuarto y definitivo set, el cordobés de Unquillo sacó a relucir la enorme calidad de su mano y jugó sin fisuras, bien acompañado por Zeballos, quien lastimó con sus saque y fue muy oportuno cada vez que se cruzó en la red para definir un punto.

Los argentinos quebraron dos veces el servicio de Kas (1-0 y 4-1) y concretaron un 6-2 que desató el festejo del público y del resto del equipo que aguardaba afuera con ansiedad la definición.

Argentina superó a los alemanes de manera más sencilla de lo que se preveía, y luego de un festejo medido, ya que se trató de un cruce de la primera ronda, comenzará apensar en Francia, un rival históricamente adverso que llegará con todo su potencial dentro de dos meses a Buenos Aires.

El equipo argentino dio el primer paso y tendrá en abril un adversario de calibre, el que dará la medida justa para saber si al fin será este el año en que de una vez por todas se pueda conquistar la Davis, esa histórica asignatura pendiente.

Sin Del Potro, una victoria sobre Francia ingresaría hoy en el terreno de la hazaña, aunque en el tenis y sobre todo en la Davis puede pasar cualquier cosa, más cuando faltan dos meses y Jaite sabe que tiene en forma a Nalbandian, que encontró un doblista (Zeballos) y que Mónaco y Berlocq son confiables.