Rodrigo Palacio fue el único jugador del seleccionado argentino de fútbol que trabajó de modo diferenciado en el entrenamiento de hoy en el predio Cidade do Galo, en Belo Horizonte, tras el exitoso debut en el Mundial Brasil 2014 con el triunfo sobre Bosnia por 2 a 1, en el estadio Maracaná de Río de Janeiro.

El delantero y goleador de Inter, Italia, se lesionó el 4 de junio pasado en la victoria por 3 a 0 sobre Trinidad y Tobago en el amistoso jugado en el estadio Monumental de Núñez.

Si bien no hubo "lesión ósea", tal como informó el cuerpo médico el mismo día del partido, Palacio continúa en proceso de recuperación.

El resto de los jugadores, tanto los que ayer jugaron ante Bosnia como los que no lo hicieron, realizaron, por separados, sendos partidos de fútbol informal en espacios reducidos.

La práctica, tras la victoria en el Maracaná, válida por el Grupo F de la Copa del Mundo, transcurrió en un clima de completa armonía y con poca prensa, en relación a los días previos al debut en el Mundial.

La euforia que se vivió ayer en Río de Janeiro dista con la paz que reina en Belo Horizonte, la ciudad que albergará al seleccionado nacional hasta el final de la Copa del Mundo.

El plantel argentino se volverá a entrenar mañana desde las 10 en Cidade do Galo, de cara al partido del sabádo, a las 13, ante Irán en el estadio Mineirao de Belo Horizonte.