Durante el mes de agosto, el consumo de bienes y servicios en los hogares argentinos experimentó una disminución del 1,8%, lo que se traduce en una caída del 7,8% en comparación con el mismo mes del año anterior. Este dato ha sido proporcionado por el Indicador de Consumo de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC).

El leve incremento en la inflación observado en agosto tuvo un efecto adverso en el consumo. A pesar de que el mantenimiento del "crawling peg" sugiere la posibilidad de una estabilización de la inflación en 2024, el aumento de las tarifas de transporte público y de agua previsto para septiembre podría contribuir a un nuevo repunte inflacionario. En este contexto, la evolución del tipo de cambio y las tarifas de servicios públicos serán factores cruciales para determinar el impacto neto de la inflación en el ingreso real de los hogares y, por ende, en el nivel de consumo que estos puedan alcanzar.

El indicador elaborado por la CAC permite observar la evolución del consumo de bienes y servicios finales en los hogares de manera mensual, complementando así la información que la Cámara proporciona sobre el seguimiento del comercio y la actividad económica. Hasta el momento, el Indicador de Consumo ha mostrado un decrecimiento acumulado del 6,4% interanual durante los primeros ocho meses del año, lo cual se alinea con la tendencia de deterioro en el consumo que se ha observado en los últimos meses.

Este comportamiento ocurre en un marco económico caracterizado por un leve aumento en la inflación, que registró una tasa superior a la del mes anterior. En agosto de 2024, la inflación mensual fue del 4,2%, con una tasa interanual de 236,7% y una acumulada anual de 94,8%.